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N.R. dixit:
"... pero ahora no puedo dependo de varios, muchos aspectos de él, es una relación de 15 años..."
Este parece el problema central. Tu relación está deteriorada y en estos casos siempre aparece un detonante, que a la larga es la excusa necesaria para dar impulso a la mutación imprescindible...
Pero lo que importa es de qué manera abandonar la prisión de la dependencia, o, como aclaraste, de las muchas dependencias que te atan.
Por eso es que me late que el hombre que te ha decepcionado ahora es más que nada un símbolo, una entelequia, algo a lo que le fuiste dando preponderancia por tu propia situación... por tu dificultad para moverte libremente, lo que te coloca en una situación de desventaja, lo que machaca aún más tu autoestima.
Mientras tanto tu vida sigue... quince años ya pasaron y tu dependencia debe ser mayor que quince años atrás.
El precio de tu libertad, no importa lo alto que te resulte, es una tarea que debe comenzar cuanto antes aunque sea en forma gradual, porque a partir de ahora tu vida corre el riesgo de estar condicionada por la aparición de hombres como el que ya se te apareció. Que rápidamente se convertirán en hombres ideales, o, en hombres que tendrás la tendencia a idealizar.
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