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Vamos a ver:
Existe un complejo mundo de convenciones sociales que sirven por un lado para no mostrar abiertamente nuestras intenciones y deseos porque eso nos pondría en una posición vulnerable ante los demás y a la vez para que podamos relacionarnos unos con otros de manera pacífica, rebajando las tensiones que pudieran producirse ante una situación de evidente sinceridad ( no se considera educado ni agradable mostrar rechazo ante una persona que no conocemos o conocemos poco y que tampoco nos ha hecho nada sólo porque su aspecto físico nos parezca poco atrayente o desagradable: a un chico gordo, dado que a ti no te gustan los gordos, no le vas a mostrar los dientes y le vas a poner cara de asco según se te acerque; le sonreirás, mantendrás la compostura y le despacharás con algo amable, educado pero claro).
Luego la cuestión de que si le gustas a alguien en lugar de decir mira, pues melafo(...), lo más probable es que se escude en un "Es una chica interesante", "Su conversdación es amena, es inteligente, divertida, me gusta hablar con ella", "Compartimos aficiones, conectamos muy bien, compartimos intereses"... es decir, los mismos artificios que empleáis las mujeres para no decir "Tiene un culo y unas tetas que me pone malito cada vez que la veo", O si no "Parece idiota, no la entiendo en el whatsapp y tiene faltas de ortografía para hacer vomitar a una cabra, pero está buena y es guapa, melafo(...)". ¿A que no conoces a nadie tan directo y tan claro?, ¿A que tú tampoco lo eres?
Pues ahí tienes que la paz social en parte se consigue a base de mentir como bellac@s.
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