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Parecerá un día cualquiera, un día rutinario más, sin ninguna señal que avise lo que está próximo a pasar. De pronto se sentirá como un cubetazo de agua fría, como si cada poro del cuerpo se abriera y respirara al mismo tiempo y una fuerte sensación de conciencia se sentirá en el cuerpo ... y ya no saldrá de ahí nunca jamás. Puede pasar a cualquier edad (sé de alguien que le pasó de niño), pero no a todos les sucederá. Aquellos a los que les sucede empezarán a cuestionar el significado de la vida y el motivo de su existencia. El ¿Quién soy? ¿Qué hago aquí? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy? serán las primeras preguntas que se anidarán en su ser y exigirán respuestas. Tratar de ignorarlas será inútil pues cada día la llama que las sustenta crecerá y empezará a quemar por dentro. Y en ese momento empezará un largo camino por recorrer. Uno se ha vuelto un sincero buscador de la Verdad.
Lo primero que se tiene al alcance es la religión, ahí se pueden encontrar respuestas basadas en la fe. Pero tener verdadera fe no implica que lo que uno piensa o practica sea correcto. Hace 800 años todos los habitantes del mundo creían con toda su fe que el mundo era plano. La religión sólo será un pequeño analgésico para la ansiedad interna que se tiene, pero al final fracasará para eliminar las inquietudes internas de la persona que quiere encontrar sus respuestas. Será entonces el momento de tocar otras puertas.
Vendrá entonces una etapa de metamorfosis para ese buscador (pensará y actuará diferente) y eso será evidente para las personas que lo rodean. Pero como no es normal salirse del "patrón" social de conducta entonces esa persona pasará como "desorientado", "loco", "raro", etc. Esa persona puede pasar varios años buscando hasta que finalmente encuentra que todas las respuestas que busca están en su interior y que es únicamente a través de la meditación espiritual el camino para llegar a su ser.
Como un cohete que va rumbo al firmamento la primera etapa ha concluido, ¿Ha llegado a su meta? No, pero en este momento ya sabe cuál es el significado de su vida. Ahora vendrá la segunda etapa: encontrar la forma más efectiva para llegar al ser. Para ello tendrá qué encontrar a un Maestro que lo guie por lo interno. Pasarán algunos años más de búsqueda, aparecerán muchos Maestros hasta que finalmente encuentra a su Maestro. La segunda etapa ha finalizado y es en este momento que empezará lo mejor.
¿Vale la pena tanto tiempo y sacrificio? ¡Come, Bebe y Sé Feliz!, encontrar el sentido real de tu vida puede esperar, dirán la mayoría de las personas.
Pero hay personas que no pueden ser como la mayoría.
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