¿Qué tienen qué ver las prostitutas? Una prosti no es para hablar, con ella llegas, se abre de piernas, le avientas el chorro, te cuenta el tiempo, le pagas y ya. No es lo mismo a una mujer cualquiera, ellas ni te escuchan, no más a lo que van.
Lo que debes hacer es lanzarte con la que te gusta, hablarle, si funciona muy bien y si no, pues ya lo contestaste, ya se te quitó el miedo, ya aprendiste y con la que sigue
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