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Todo lo que te cuentan está muy bien...pero tu cada día del año, entras en la oficina y ves el pastel, ese que te quieres comer y que por el momento está fuera del alcance de tu mano. Hagas lo que hagas, el pastel está delante y la frustración crece y crece. Como la mente es libre, no la puedes doblegar así como así.
Puede que incluso si te lo trabajas lo consigas, piensa que una persona medianamente inteligente, con un cargo de responsabilidad y un poco de experiencia, mantiene muy bien una pose de indiferencia mezclada con un trato correcto como una defensa para marcar la distancia, Para el, cualquier lío en la oficina es un riesgo y un problema porque puede afectarle a su cargo y su promoción. Puede ser desinterés real o pura pose. Para saberlo hay que mojarse.
El riesgo lo tendrás que asumir para saber si hay posibilidades, o tendrás que tomar medidas más duras como cambiar de departamento o de trabajo, la otra posibilidad es aguantar y aguantar esperando que te se pase....no hay soluciones mágicas.
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