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A ver, tranquilo, vamos a desembrollar un poco este lío.
Tú tienes claro que la vas a dejar. Cuando más tardes en hacerlo, más enganchada estará ella y más te costará (y le costará).
Tú no eres el responsable del bienestar de esta chica. Es difícil y duele hacer algo que pensamos que puede dañar a alguien a quien tenemos afecto, pero no podemos proteger a las personas eternamente de la vida y la vida incluye muchas despedidas, aprender a asumir las pérdidas y conquistar poquito a poco la felicidad por uno mismo sin depender de los demás.
Tu amiga no nació pegada a ti. No te debes a ella ni puedes sacrificar tu vida y tu bienestar porque ella no sufra. Si sufre por una relación que nunca se ha llegado a materializar, probablemente sea porque ya arrastre otros problemas anteriores que no tengan nada que ver contigo y que tú no le puedes solucionar.
Cuando le dices que lo quieres dejar, tu amiga amenaza y suplica, lo cual no habla de lo mucho que te quiere, sino del miedo que le da volver a su soledad.
El mejor favor que puedes hacerte (haceros) es liberaros ambos de esta historia para poder seguir adelante. Y lo antes posible. El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional.
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