Yo alucino.
No conociéndome de absolutamente nada me recomendáis que me vaya de ***** y me llamáis "depredador sin escrúpulos". Así, sin un café para digerirlo. Como conocéis mejor que yo mismo mi situación y la de mi pareja os permitís el lujo de criticarme con la bayoneta entre los dientes y sin ningún tipo de argumento razonable. Sois cojonudos (o cojonudas)!!
Me encantaría ser tan perfecto como vosotros, oh insignes compañeros de foro, pero Dios me hizo así de malo. No sé cómo puedo vivir con esta maldad que llevo dentro, con este institnto depredador que me ha salido por estar "harto de pajearme", pero he de seguir adelante con mi atrocidad de conocer a alguien sin tener que pagar a una prostituta. Espero que el tribunal de la Haya me pueda perdonar.
Si no os gusto yo o lo que escribo, postead en otros hilos, que el mar es muy grande.
Hala con Dios.
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