En mi caso, al principio del contacto cero estaba más tranquilo pero según pasaba el tiempo llegaron los bajones. El no saber nada a mí me llevaba a imaginarme lo que estaría haciendo de su vida y dada la baja autoestima propia del momento, pues tendía a pensar cosas que me hacían daño (le imaginas con otra persona y feliz, piensas que ya te ha olvidado y que su vida es mejor sin ti, que ya no le importas, que su vida es mucho mejor que la tuya, etc). Supongo que formará parte del proceso de recuperación. Actualmente ya queda poco de todo eso y estoy muy contento. Es cuestión de no desesperarse y tener paciencia. Ánimo
|