-No lo haría, para empezar porque el compromiso de ser fiel y respetarlo no sólo es con él, sino conmigo, con los principios sobre los que baso mi vida. Al engañarlo traicionaría no sólo su confianza y la promesa que hicimos al casarnos, sino todo aquello que soy y en lo que creo.
-Lo amo. Y como lo amo, lo respeto y quiero que sea feliz. No quiero lastimarlo, no haría algo que pudiera hacerle daño sólo para satisfacer una calentura.
-No lo necesito y no me apetece. El sexo lo he experimentado únicamente con el hombre que amo y me satisface no sólo a nivel físico. El sexo por sexo está bien para quien así lo quiera, pero a mí no se me antoja, a estas alturas del partido me parecería algo muy vacío.
|