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Tengo 29 años y hasta ayer sólo había besado a sapos y ranas. Uno que otro príncipe que se había convertido en sapo tb.
Hasta que conocí al hombre de mi vida. Congeniamos en todo. Amable, inteligente, muy guapo, honesto, noble, educado, caballero, sencillo, simpático, divertido, fiel.
Pero la mierda es que el mundo es muy grande. Este hombre vive a 14horas de avión de distancia y 7 horas de diferencia horario.
Adios B. Te quiero y sé que nunca más nos veremos. Espero al menos poder conocer a algun doble tuyo algún día. Me has enseñado de que en el mundo existen hombres maravillosos como tu. adios.
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