Hola soy un "chico" de 34 años y me considero un cazador cazado. El motivo es el siguiente, tras una relación de casi 4 años con mi novia -5 años más joven, corté con ella en verano, simplemente porque tenía miedo en comprometerme a tener hijos -ella quería. Me había casado con 25 y ya había pasado un divorcio aunque sin hijos. Siempre he sido fiel y el problema fui yo, no por convivencia si no por miedo. Nos llevábamos fenomenal.
Sin embargo, tras dejarla en muy buenos modos, seguimos viéndonos e incluso alguna vez viajamos tras cortar. Me di cuenta tras un periodo de reflexión que realmente cometí un grave error y que quisiera casarme con ella. Se lo deje ver en una carta que le mandé en Noviembre. Quedamos en Navidades y en un ambiente romántico le pedí que se casara conmigo, que había recapacitado. Ella me dijo simplemente que no, que le había hecho mucho daño y tenía rencor. Que seguirìamos como amigos y que no podíamos continuar la relación donde la dejamos. Creo que para apaciguarme, me dijo que ya veríamos en unos seis meses y mientras que ella haría su vidas y que yo hiciera la mía, aunque quedáramos como amigos de vez en cuando. Me indicó que había cambiado, que se había dado cuenta que muchos otros la aprecian más de lo que yo lo hice. Al mismo tiempo me dijo que si se lo hubiera pedido nada más dejarla sí hubier
a aceptado sin pensárselo, pero que había perdido la oportunidad.
Aunque niega que esté saliendo con alguien, no me lo creo, estoy seguro; no por celos si no porque sé cuando me miente. No me importa que se haya citado con alguien, es legítimo, yo la dejé. La cuestión es, debería darle un tiempo o plantearle drásticamente que ya he puesto mi parte, que ya he expresado mis intenciones sinceras, pero que no veo reciprocidad y por tanto dejarla? Si soy tajante, ¿tendrá que mover ficha no? Ahora sabe que me tiene y por eso quizás no me valore y quiera probar alguien mejor, consecuencia juega conmigo. Quizás ya no me quiera.
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