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Primeramente, me alegra mucho poder tener este espacio para expresarme y agradezco desde ya a aquella persona que se tome la molestia de leer lo que escribo.
Hace ya cuatro años conocí a alguien, en realidad fue un encontronazo forzado, ya que una de mis amigas estaba "obsesionada" con él y otra amiga, (que no tiene nada que ver con la anterior antes de que crean que fue un mal acto) arregló una cena para ella, yo, el chico que les mencioné y su amigo. Al principio me negué, pero algo adentro mío dijo que sí, aún hoy me pregunto por qué. Resumiendo un poco, esa noche fue el inicio de una relación clandestina a escondidas de todo el mundo, de mis amigas, de mi familia, de su novia (SI, APARTE DE TODO TAMBIÉN TENÍA NOVIA). Todo fue, por lo menos al principio, una diversión por parte de ambos. Pero después la cosa se fue intensificando..
Por él hice las mayores locuras, me separe un año y medio con mis amigas porque éstas lo descubrieron todo, me gane grandes discusiones con mi familia, y sufrí muchísimo pero no me arrepiento de nada. Creo que hasta el día de hoy estoy pagando por mis errores. Él, aunque no pido que nadie lo entienda, también hizo por mí las cosas que nadie nunca hizo, me salvo de mil maneras. Toda mi vida me sentí sola, hasta que él apareció y me sostuvo en los peores momentos. Juro que si volviera a vivir, repetiría nuestra historia mil veces más. Juntos fuimos a escondida lo que muchas parejas no son en su propia libertad.
Él siguió con su novia, y yo de por medio también tuve mil aventuras más (nunca supe mantener una relación estable, siempre quise ser libre, sin que nadie me dijiera qué hacer), pero siempre volvíamos a juntarnos después de lastimarnos mutuamente, era algo más fuerte que nosotros. Así, hasta el último tiempo en que las cosas se estaban poniendo insoportables, y en el momento que le planteé "O ella o yo", él me eligió y la dejo.. pero cometí el error de meterme con alguien más, él se enteró y hace casi dos meses que no hablamos, volvió con su novia y parecen estar lo más feliz que nunca.
Pueden juzgar, a él, a mí, mal o bien, pero no se dan una idea del dolor que siento por dentro, de lo feo que es volver a sentirse vacía, de cuánto lo necesito, de la impotencia que siento al darme cuenta tarde que mi vida y mi corazón le pertenecen y que ya no quiero la libertad, porque inclusive ser libre sin él, carece de todo sentido..
Gracias por su tiempo!!
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