Si la otra persona fuese a ser totalmente franca, compartiría al 100% tu opinión. El problema es que, en la mayoría de los casos, suelen ser excusas de las que no se suele sacar nada en claro.
Estoy de acuerdo. Siempre he sido de la idea de que nadie es dueño de nadie, y que si por el motivo que sea, alguien no desea estar más a mi lado, la causa es irrelevante. Que siga su camino y yo...