Llevo dos semanas de previa, preparándome para subir ahí arriba y poder mirarle a los ojos sin temblar, y jamás me podría haber imaginado un desenlace tan...
Ha sido doblar la esquina, y ha subido la temperatura a 48 grados, el corazón ha cogido carrerilla y ha empezado a ir a toda hostia, y no me he visto capaz de tenerle...
Me encantaría decir que volver a verte ya no suscita ninguna emoción en mí, pero la verdad es que tengo todas las sensaciones que se pueden tener de botellón por aquí....