Guest
|
Ok, estoy soltero hace poco más de un año. Vengo de un noviazgo en el que no me sentía valorado ni contenido. Ni deseado. Seguramente comentí mis errores yo también (el primero de ellos, haber seguido apostando a la relación pese a todo), pero en fin, no estoy acusando ni culpando a mi ex. No me sentía querido y ella se empeñaba en buscar el error en todo lo que yo hacía. Por eso, finalmente, decidí alejarme.
Desde entonces, no tuve mucha suerte con las chicas.
Tengo 34 años y empiezo a tener la impresión de que me volví viejo y poco atractivo. Nunca me sentí atractivo, en realidad, pero cuando era más joven, al menos, sucedían cosas con algunas chicas. No lo podía creer, y sin embargo, ahí estaba, llamando la atención de alguien que yo consideraba fuera de mi liga y etcétera.
Creí que luego de separarme iba a experimentar un renacer sexual. Que iba a poder divertirme y compensar el tiempo que estuve angustiado y sufriendo el desinterés de alguien que no me amaba. Y que, pasado un tiempo, y habiendo conocido distintas chicas, iba a poder empezar a sanar y a pensar en sentar cabeza con alguna.
Eso no sucedió.
Tuve un par de encuentros con algunas. Salvo en un par de ocasiones aisladas, no fue nada que disfrutara mucho. En algunos casos hasta me arrepentí profundamente. ¿Se acostaron, alguna vez, con alguien que no les atraía en lo más mínimo, sólo por calentura o para buscar validación? Bueno, yo lo hice en más oportunidades de lo que hubiese querido.
Llegué a pagar por sexo. Fue la única manera de encontrar una experiencia disfrutable. No me enorgullece ni me avergüenza. Pero no es lo que prefiero.
Toqué fondo el mes pasado. No me acosté con una chica que no me atraía, sino con tres. En una semana. Fue una locura. Me deprimí. Era como si tuviese la intención de hacerme daño a mí mismo. No soy quién para juzgar el atractivo de nadie (en primer lugar, porque, como ya dije, no pienso que yo destaque en ese aspecto). Pero les aseguro que me sentí pésimo. La última vez, la tercera, directamente no pude conseguir una erección. Era como si mi cuerpo hubiese querido huir de ahí.
Creo que, desde entonces, le tomé asco al sexo. Estoy caliente casi todo el tiempo, pero me produce rechazo el sólo imaginarme el cuerpo, los fluídos y los olores de una mujer. No quiero ofender a nadie con esto. Me da culpa expresarme así, pero es lo que siento y quisiera no sentirlo.
¿Tres chicas distintas en una semana? Sí, suena absurdo para alguien que no se considera atractivo. Pero bueno, así como ellas no me resultaban atractivas, no me cuesta nada deducir que yo tampoco les resulté atractivo a ellas. El buen sexo se hace de a dos, y el mal sexo también. Por lo demás, estaba en todas las apps de citas que se imaginen: Tinder, Happn, Badoo (sí, Badoo), AdoptaUnChico, OkCupid, Meet.me, etcétera. Y me di de baja de todas, porque no hay match con ninguna. Ninguna ninguna. A aquellas tres las conocí en distintos lugares, a lo largo de un año. Hablábamos por WhatsApp cada tanto, sin concretar nunca nada. Hasta que lo hicimos y acá estamos.
Las apps de citas son deprimentes. Al menos para mí. No sirven para otra cosa más que para confirmar lo que yo ya siento: que no soy deseable, que no soy atractivo, que nadie querría pasar conmigo una noche de diversión y placer (por patético que suene), que no puedo despertar la pasión en nadie, que mucho menos puedo aspirar a una relación formal más adelante... excepto que me conforme con la primera que me preste algo de atención, a riesgo de repetir la historia con mi ex.
Sí, el atractivo y la seducción son cuestiones de actitud. Pero la actitud se refuerza con estímulos positivos. Salir con una chica que te gusta y pasar un buen rato te hace sentir bien y te genera confianza, y eso se retroalimenta, y es de esa manera que se logra una actitud atractiva, seductora, etcétera. Pero yo no hago más que caer cada vez más bajo. Y confirmar que no soy deseable. Es muy deprimente. ¿Qué actitud es posible en un caso como el mío?
No sé por dónde empezar a solucionar esto. Quisiera disfrutar de mi sexualidad como cualquier hombre de mi edad (si hago caso a lo que me dicen mis amistades, todavía soy, supuestamente, joven... al menos en comparación con una persona de ochenta años). Quisiera no tener que depender sí o sí de un noviazgo para tener sexo (sería horrible fingir amor para lograr ese objetivo, no quiero ni pensarlo). Quisiera poder hacer un montón de cosas de las que me siento incapaz ahora mismo, y no le veo la salida a esta situación. De pronto, me encuentro haciéndome la misma pregunta que a mis 18 años: ¿Qué es lo que hay que tener para gustarle a una chica y que yo, aparentemente, no tengo? ¿Qué hay de malo en mí? Me da vergüenza no haber aprendido absolutamente nada en todos estos años.
Cuanto tenía 18, buscaba el amor. Pero el amor no llegó. Ahora busco, al menos, sexo. Pero tampoco hay sexo.
Disculpen, pero necesito un buen polvo que me haga olvidar de estos problemas. Un polvo realmente bueno. Sin compromisos, sin amor, sólo por el gusto de hacerlo. Pero ni siquiera eso.
Gracias por leer.
|