| Julio1956 |
¿Qué clase de pareja quieren construir y con qué objetivos comunes en la vida?
Hoy vivimos una época en donde las relaciones humanas están en crisis. Lo vemos claramente en el plano internacional cuando observamos no sin estupor, la dura realidad de 4 millones de Sirios y la foto de ese niño ahogado.
Lo vemos en las dificultades para obtener el trabajo deseado y fundamentalmente, en el desamparo esencial del hombre aherrojado a un mundo signado por el absurdo, el atropello y la irracionalidad, en donde por la más insignificante cuestión, podemos perder la vida.
Es indudable que nos está faltando una serie de herramientas conceptuales para encarar esta crisis moral de nuestros días, porque si bien es cierto que con ideas generales, no se sale de una crisis, sin ideas generales, no se puede ir a ningún lado.
La primer herramienta, creo yo, que estamos necesitando es una teoría del conflicto, porque el tema no es cómo tratar de evitarlos ya que éstos siempre existieron y existirán desde que el mundo es mundo y el hombre camina sobre la tierra; la cuestión de fondo es cómo encarar los dilemas inevitables que se ciernen sobre nuestras vidas: la relación marido y mujer, padre e hij@s, patrón y empleado, inquilino y propietario, productor y consumidor.
Una teoría del conflicto permitiría esclarecer lo que realmente está en juego en cada cosa, puesto que vivimos en un mundo plagado de complicaciones, en donde si a ese malestar se lo saca de contexto, no significa absolutamente nada, para nadie más que aquel que lo padece.
Junto a esto estamos precisando a mí entender una teoría del vínculo, puesto que es justamente lo que está en cuestión a medida que la conflictividad existente se nos va tornando tan novedosa como inmanejable. Es como que no estamos preparados, ni siquiera conceptualmente para ser conscientes de lo que debemos enfrentar, mucho menos cómo hacerlo.
Saber qué hacer no es suficiente, se necesita también saber cómo hacerlo, pero estamos ante dilemas y aporías en donde ni siquiera tenemos noción de lo que está realmente en juego y mucho menos lo que nos espera, tras la pasividad y las dudas e incertezas que esa falta de luz nos genera.
El amor refracta en chiquito y en el plano de nuestras vidas lo que una teoría del conflicto debiera decirnos y es esencialmente, la parte nuclear y central de una teoría del vínculo.
Conociendo las limitaciones teóricas que la ausencia de un modelo de encare de los problemas conflictivos que el vínculo hombre y mujer expresan, abro el hilo haciendo la interrogante fundamental: ¡Qué tipo de pareja queremos para transitar por nuestro derrotero en la vida!
Mi pregunta es bien concreta: ¿Qué clase de pareja quieren construir y con qué objetivos comunes en la vida?
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