Más de una semana sin ti.
Amor, compañía, complicidad, resguardo, comprensión, amistad, tiempo, dedicación, risas... no sé qué me dabas, pero el vacío que has dejado me está ahogando, ese silencio, esa desesperante espera, un cambio de dirección, un arrepentimiento...
Yo: conformista, incompleto, inseguro, inmaduro e inquieto; tú: decidida, firme, cabal, sólida y sensata.
Dependencia emocional, qué simple definición para algo tan inmerecidamente doloroso.
Sólo quería ser yo, sólo quería tenerte, sólo quería contarte cómo fue mi día, egoísta postura que olvida al "otro", inevitable desenlace que mina al "uno".
Lo leerás, quizás por eso esté escrito y no sólo sentido, pero es que no tengo otro "auxilio" al que contarle cómo perdí al último...
Siento arquearme, sigo respetando tu decisión, aunque lo he buscado, no he encontrado otro lugar donde desahogarme, allí no estabas tú.
|