Hola Ofi.
En referencia al tema que comentas pasé por algo similar. De secundaria a bachillerato acabé cambiando 3 veces de instituto y de ciudad hasta que volvíamos de nuevo al mismo sitio donde vivíamos y vivimos. Mi madre por aquel entonces era maestra interina y pues cada curso sino todos los años cambiaba de pueblo y colegio. Y pues los 4 años antes de que acabase siendo fija, mis padres decidieron que mejor la familia unida. Y ahí nos tocó cambiar e irnos con mi madre. Una faena, por no decir otra cosa.
Pero al caso, lo importante es que seas tú misma, no tienes que caer bien a nadie. Actúa natural, la gente te acoge y te da una oportunidad, cuesta, no lo discuto. Pero tan sólo mostrándote cómo eres acabarás con un grupo de amigos más acorde a tu estilo y caracter. Ya sabe que cada clase es un mundo y está dividida en grupitos.
Si la cosa es que empiezas primero de bachillerato piensa que quizás haya alguien en tu misma situación y no seas la única nueva en clase. Aún en el caso de que vuestras personalidades no se amolden, es un primer paso a dar, una primera amistad y la primera oportunidad.
En caso de que no hubiese nadie más en tu situación, como tú dices, con la cabeza bien alta, entra en clase y supongo que la distribución de las mesas será por parejas, con quien te toque sentarte, toma un primer contacto, ves poco a poco dejándote conocer y al mismo tiempo conoce a quien tienes al lado.
Habla con la gente pero no fuerces nada, deja que todo fluya poco a poco. Olvídate de un discursito preparado, tampoco frases. Empieza presentándote, haciendo saber que eres nueva. Los nervios quizás puedan jugar una mala pasada, pero piensa que es un comienzo estás asustada pero estás ahí y puedes enfrentarte a ello.
Es tu nuevo comienzo, disfrútalo porque puede ser muy dulce y divertido. Disfrútalo