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Hola amiguetes, aquí estoy para plantear una extraña cuestión:
Veréis, la cosa es que el amor va y viene, empieza y se acaba y todo eso, pero, sin embargo, parece que hay maneras más formales o elegantes de romper que otras, que en definitiva nos hablan de educación y de calidad humana incluso en el asqueroso momento de tener que dejar a alguien.
Una vez estamos en el proceso de la ruptura, si la cosa se ha hecho de manera poco elegante, con una previa desaparición de por medio y demás, ¿La persona a la que dejamos tiene derecho a saber qué ha pasado con pelos y señales? ¿O lo correcto, lo valiente y lo normal es escudarse en el derecho a no tener que justificarse ante nadie? Ya metidos en esta cuestión se me antoja la pregunta de si este comportamiento no es el que muestran los políticos para, una vez la han liado parda,. irse sin tener que rendir cuentas de su mala gestión. ¿Es un contagio que suena bien de prácticas corrupias?
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