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En el año 2003, traté el caso de una pareja muy singular, de quienes no diré sus verdaderos nombres, pero los llamaré Carlos y Sofía. Llegaron a mi consultorio, la tarde de un martes del mes de octubre. Algo tímidos, me fueron poniendo al corriente de su situación. La familia de Carlos, no aceptaba a Sofía, pues ella tenía 16 años mas que él. Decían que sin dudas podría haber sido su madre y que ella estaba tan enferma como Carlos. Asi las cosas, su relación pendía de un hilo, porque nadie de su entorno los apoyaba. Fue entonces cuando decidieron recurrir a una terapia de pareja. Me hicieron ver sus perpectivas del asunto y dejaron mas que claro, que realmente se amaban y se necesitaban mutuamente. Carlos no era ningún niño. Con 30 años podía decidir por si sólo su destino y con quien compartirlo. Sofía, con sus 46 años, daba de si lo mejor para que él se sintiera feliz a su lado. Luego de 9 sesiones, llegaron a la conclusión de que todo en esta vida gira en torno "al amor". Consiguieron entender que la familia de Carlos nunca podrá entender su amor por ella, por lo que no valía la pena angustiarse por lo que pensaran los parientes. Se tenían el uno y el otro y eso es lo que en verdad importaba. Cuando les hice ver que con el transcurso de los años se notaría la diferencia de edad, ambos sonrieron y dijeron casi al mismo tiempo..."no nos importa". Hasta el año 2010, supe que todo marchaba bien entre ellos. Después no volví a saber mas nada de sus vidas. La terapia que hicieron juntos conmigo, les ayudó a darse cuenta que lo importante en una relación de pareja, no es la edad... es el "poder" que ejerse entre ellos el amor... es entender y aceptar con todos sus defectos y virtudes, al compañero/a... es encontrar en el otro, refugio, apoyo, compañerismo, complicidad, contención, etc... Quizá todos estos estados no se puedan encontrar o descubrir entre personas de edad acorde, porque no existen normas o reglas que regulen o garanticen felicidad según la edad. "Cuando se encuentra el verdadero amor en los ojos de alguien, no importa cuantos años tenga su mirada" (Alberto Peña - poeta argentino)
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