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Se supone que soy un hombre (no estoy seguro de ello) y que tengo una cierta edad (de esto sí lo estoy), pero en estos últimos 3-4 años me han pasado algunas cosas que me estan haciendo plantearme un par de cuestiones.
La primera sería que quizás sea una persona sensible, es decir, débil. Como quiera que la debilidad es sinónimo de vulnerabilidad, he decidido fortalecerme y perder esa cierta sensibilidad que en el fondo me lastra.
La segunda es que he vivido muy pendiente de personas que he ido conociendo a través de la Red, entre ellas, una novia que al dejarme fue lo que me impulsó a entrar en este foro. Por ello he decidido que eso se acabó. las personas se conocen tratándolas de frente a frente y en la calle (pero yo no debo hacer eso, no es mi destino, mi destino es otro). Internet es una falacia y quienes por la Red transitamos somos sólo personajes.
He asumido que el amor no esta hecho para mí, que no volveré a amar ni a ser amado, Darwin tiene razon: la Naturaleza por medio de la selección natural trabaja escogiendo a ciertos individuos para que transmitan sus genes a las generaciones futuras, a los más aptos, y selecciona a otros para la desaparición por ser portadores de genes recesivos o de adaptaciones innecesarias. En mi caso se cumple esta premisa y por eso la Naturaleza me ha escogido para la desaparición, para apartarme del camino de la especie, mis genes no se transmitirán a la generación siguiente y no aportaré nada al futuro de la especie humana.
La parte dura del proceso de desintoxicación es asumir eso, que da igual lo haga o diga, que da lo mismo a quien se lo haga o diga, que no importa, que simplemente no existo, que mi faceta sexual y reproductiva está obviada porque resulta incómoda, que es mejor deshacerse de ella.
Mi proceso de desintoxicación me lleva a convertirme en lo que realmente debo ser: un mero espectador, sin anhelos, sin insatisfacciones, totalmente desapasionado, sin ningún interés en intervenir y en ello me convertiré. mi camino empieza ahora, a ver a dónde me lleva.
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