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Iniciado por XXMARIODOSXX
Hola a quien me quiera leer, escribo aquí una vez mas, no se porque pero creo que necesito desahogarme y ser leído, realmente siento que ya no puedo mas, no se si alguien se ha podido sentir así alguna vez, supongo que todo el mundo ha podido hacerlo, durante 27 años sentí y me decía a mi mismo una verdad demoledora, “nunca nadie te ha querido ni te querrá de verdad “sentí que a día de hoy nadie sabe querer a nadie, relaciones de interés, materiales, frívolas, inmaduras o miserables son las que veo que rodean el mundo, la mentira es capaz de mantener mas una relación hoy día que un corazón sincero noble y puro y es muy triste.
Cuando tenía 15 años vivía en una familia desestructurada y me volví frío cada vez mas, con odio y aprendí a ser así, a alimentarme de odio sustituyéndolo por el amor, pero por dentro lo que más necesitaba es la necesidad más básica e importante del ser humano ser amado y correspondido, durante muchos años a pesar de las decepciones esa ilusión tenue dentro de mí de alguna manera me mantuvo en este mundo, cada año y cada día eran un golpe que muchas veces me hacia tumbarme, decepción tras decepción hicieron que muchas veces de verdad no quisiera levantarme mas pero a pesar de todo, en lo mas profundo de mi guarde un pedacito de esperanza e ilusión que hasta yo miso olvide que tenia…a pesar de todos los años, las decepciones y sentir que no podía mas, una persona sin buscarlo ni esperarlo se cruzo en mi vida mostrando una luz en la oscuridad…alguien que era realmente diferente a todo pero igual a mí al mismo tiempo, y durante mes y medio consiguió lo imposible, que yo volviera a creer y confiar en alguien ciegamente….lo consiguió, de veras lo consiguió, después que todo el mundo y yo mismo me dije que jamás seria capaz de confiar en nadie…lo hice…di todo, deje todo por estar con ella y durante ese tiempo por breve que pueda parecer sentí que por fin había encontrado mi familia…todo lo que llevaba buscando durante toda mi vida…lo encontré cuando no pensaba encontrarlo jamás….llegue…llegue a creer y confiar realmente en esa persona…pero hace 1 semana después de 4 días horribles llorando en su casa porque ella no quería seguir conmigo volví a Madrid totalmente destruido salvo por el pequeño pedacito que se niega a olvidar que creyó en ella, que confió en ella y no se puede creer que todo lo haya tirado sin más…y que este diciembre no estaríamos juntos como planeamos…ni nunca volveríamos a vernos…siento que lo único que puedo hacer es destruir el pedacito que es lo único que queda de mi, el jamás dejara de creer en esa persona y en el sueño de tener una familia juntos….la que nuestros padres no nos dieron…no puedo…no quiero…no soy capaz de vivir mas…
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Desde que estamos pequeños se nos ha dicho y enseñado que debemos de ser buenos siempre, para todo y con todos.
Después de varios años, ya habiendo crecido, nos damos cuenta de que entre más buenos somos queremos que nos paguen con la misma moneda, lo único que logramos es que nos traten peor, de que en algún dado caso se llama karma, que "sucede" cuando uno hace algo bueno le pasarán cosas buenas, pero cuando alguien hace lo contrario le sucederán cosas malas, pero cuando este NO se cumple de manera correcta llegamos a sentirnos que fuimos tratados con injusticia.
La realidad es que a todos se nos ponen adversidades ya sea si hacemos las cosas bien o no y la felicidad no se le niega ni a los maquiavélicos. Todos estamos expuestos a las crisis siendo parte de la vida. Ya es responsabilidad de cada individuo si quieren la emoción que les embargaría como resultado de comportarse de forma desleal o la satisfacción de sentirse bien consigo mismos.
Eso de que seas de corazón sincero, noble y puro no es garantía de nada para que la gente te quiera eternamente.
Los buenos no son tan buenos y los malos no son tan malos; nos encanta los estereotipos y lo anecdótico. Sin embargo las críticas si no son constructivas no suelen ser de mucha utilidad.
Las opiniones deben estar basadas en comportamientos, por eso habría que centrarse en los comportamientos que se esconden detrás de la etiqueta "bueno": le cuesta tomar decisiones dolorosas, trata de caer bien a todo el mundo, no se captan matices en su tono de voz cuando está enfadado, siempre cede al bien común en lugar de beneficiarse a si mismo, sacrificarse para satisfacer a la pareja,etc…
Una vez expuestos los comportamientos y, por supuesto, el contexto en el que se dieron, se puede entrar a valorar si se deben mejorar su "bondad" en la que no deben esperar recompensa por ello: Y el cómo hacerlo, algo que acompañado de una buena actitud estoy seguro que podría llevarse a cabo fácilmente. Esto, sin duda, sería lo más profesional.
El ser buena persona no va a incidir negativamente en su entorno. Mientras una buena persona trabajará para mejorar y hacer mejores a los que les rodean, una mala persona no dudará en usar sus talentos para perjudicar a quién se cruce en su camino.
CONCLUSIÓN: no creo que existan buenos o malos en un término absoluto, no creo en bondades o maldades congénitas, pero desde luego tengo la certeza de que no es congruente esgrimir el hecho de ser buena persona como la raíz de un rendimiento adecuado.
A pesar de ser una persona apacible puedo llegar a lastimar a los demás que quiero aunque no lo haga intencional. Eso no me hace mala pero al no evitarlo tampoco me hace buena.
Fui la dejada en la relación. De todas formas quiero exponer mi caso en el tema. Nunca me hice ninguna de las preguntas formuladas en este hilo ¿Porqué? Admití que lo mejor era separarnos, amaba demasiado a ese hombre a un punto de entender que su felicidad no dependía de mí así como él no le correspondía el hacerme feliz.
Nuestros caminos se tenían que disgregar debido a que cada uno tenía anhelos diferentes no siendo compatibles o recíprocos. Y es que de haber querido luchar por continuar juntos desde allí la situación se habría estropeado ya que no creo en los sacrificios, luchas, ni oportunidades, en una relación.
El amor es libre, así que si le ponemos pruebas para que las supere como luchar por nuestros ideales se expele las creencias de la pareja por beneficio propio.
Allí se pierde el equilibrio.
El pedir sacrificios nuevamente se suprime los sentimientos y pensamientos de la pareja. Centrándonos en lo que nos conviene sin importar lo que pueda ofrendar con tal de seguir a nuestro lado.
Allí se pierde la armonía.
Creo plenamente en las segundas oportunidades pero estás no significan borrón y cuenta nueva. Es el de trascender de manera individual gracias a lo que se aporto y se obtuvo en el noviazgo.
De esta manera no se comete los mismo errores en la siguiente relación que se tenga.
Desde el principio gracias a los cursos de autoestima se nos disciplino que las personas no nos pertenecen. Teniendo este precepto constantemente en mente cada acontecimiento, elección y discrepancias me aplique como se debía actuar en pareja procediendo como iguales. Ninguno debía sentirse superior o inferior al otro o de lo contrario,
se pierde el bienestar.
Era su primera novia, no me paso por la cabeza ser la pareja definitiva en su vida, sino que mi alter-ego me decía como se debía comportar para obtener una relación sana.
Solamente piensen en esto: si una mala relación deja secuelas a un punto de dejarse vencer por el miedo.
¿Qué repercusión deja una buena relación? Supongo que la esperanza en el amor no se pierde y el miedo no prevalece.
Piensa en esto. Algo que sabes te da bienestar no es fácil renunciar a ello.
Digo, si las malas relaciones cuesta bastante desapegarse, ahora imagina las que no fueron tóxicas.
Siendo que como no apruebo los sacrificios debió ser duro para él también desprenderse pero que a la larga de no haberlo hecho se nos hubiera pasado factura lamentando lo que se dio con tal de seguir juntos.
CONCLUSIÓN: No dependas que una persona sea la razón de tu felicidad porque acabas de aprender que por las malas que si te falta tu estabilidad emocional colapsa junto con tu creencia de la bondad y el amor en el mundo.
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